Por: Alejandro Gómez Sotelo.
Dentro de las pocas joyas del barroco mexicano por excelencia de la nación, no existe una igual a la majestuosa parroquia de Santa Prisca y San Sebastián, porque aún y cuando se tienen monumentos en otras entidades del país, pero el templo de Taxco fue pensado y edificado en un tiempo record donde se ocuparon las mejores manos y talentos de esa época, aseguró la titular de la Secretaría de Cultura del Gobierno Federal (Secultura), la guerrerense Alejandra Frausto Guerrero.
En su visita al “Pueblo Mágico” para entregar la restauración del templo religioso severamente afectado por los sismos del 2017, la funcionaria federal reconoció que a varios siglos de la construcción de la iglesia junto con sus torres su belleza y patrimonio no han sufrido modificaciones, cuando otros edificios de los siglos XVI, XVII y XVIII si presentan intervenciones posteriores, “los materiales trabajan de manera distinta”.
Frausto Guerrero, dio a conocer que especialistas a cargo de la rehabilitación de la iglesia y bajo la supervisión del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), llevaron a cabo labores de limpieza, retiro de elementos dañinos y pináculos afectados, acciones de restauración preventiva, atención a grietas e intervención de la cúpula y la linternilla, además de cocidos e inyecciones en áreas afectadas.
Ante autoridades eclesiásticas y locales, aceptó que los temblores del 2017 provocaron daños muy fuertes al templo y por ello se colocaron sistemas de tensores únicos en cuestión de arquitectura barroca, que son elementos reversibles con capacidad de romper los impactos de los movimientos telúricos en los momentos exactos cuando se originan, “son los utilizados en los grandes rascacielos para evitar pérdidas parciales o totales de los monumentos y se pueden quitar cuando lo decidan”.
Defendió que se efectuó una labor responsable con las manos y talentos más capacitados en la materia, para llegar a soluciones efectivas por medio de las cuáles se permita la preservación de ese tesoro y legarlo a las generaciones venideras, “es una joya del barroco que se preserva en estos días, no se le quitaron elementos ni tampoco se perdieron retablos, porque taxqueños, autoridades eclesiásticas y servidores públicos son conscientes de su patrimonio”.
Alejandra Frausto Guerrero, mencionó que los movimientos telúricos de hace siete años cruzaron exactamente por los lugares donde más patrimonio cultural edificado existe, como es el caso de Taxco con la Parroquia de Santa Prisca y San Sebastián en una aparente y tremenda ruta marcada, así como en el resto del estado de Guerrero, Chiapas, Morelos, Oaxaca, Puebla y Tlaxcala, que fueron los lugares con mayores afectaciones.
Indicó que la mayor parte de los templos están edificados sobre la zona de sitios prehispánicos, en donde los lugares sagrados independientemente de la época no pierden su naturaleza sagrada, porque por debajo se encuentran las culturas madre en que se edificaron los recintos para evangelizar y honrar al maíz, semillas y la fertilidad.
Sostuvo que Taxco tuvo un lugar excepcional en la época colonial, debido a que las monedas de plata que salían de ese lugar llevaban doble quintaje por la pureza del mineral utilizado en su elaboración, “mi familia ubica a Taxco como la montaña de plata”.