Por: Alejandro Gómez Sotelo.
Trabajadores de los juzgados de primera instancia del Distrito Judicial de Alarcón de Taxco, se sumaron al paro de labores iniciado por el Sindicato Único de Servidores Públicos del Estado de Guerrero (Suspeg) y cerraron las instalaciones del poder judicial, para exigir un incremento salarial del 14 por ciento igual al otorgado a basificados del sector central del gobierno estatal, así como su rechazo al cobro de Impuesto Sobre la Renta (ISR) en sus prestaciones.
Se trata de afiliados a la sección II del Suspeg de los juzgados de paz, civil y penal de Taxco, Tetipac y Pilcaya, quienes pidieron la intervención de la gobernadora del estado, Evelyn Salgado Pineda, debido a que son objeto de discriminación al negarles el subsidio del ISR en sus prestaciones, cuando a los empleados del sector central del estado les dieron ese beneficio a la par del incremento salarial del 14 por ciento.
Con lonas colocadas en la reja principal del edificio del Tribunal Superior de Justicia (TSJ) en Taxco y la suspensión total e indefinida de los trabajos en los juzgados, los paristas se inconformaron por haber recibido un aumento salarial del 10 por ciento el año pasado cuando el planteamiento inicial fue del 14 por ciento y demandaron una homologación con su respectivo retroactivo, porque a los basificados del estado si les cumplieron con ese incremento.
Reclamaron la devolución del cobro de ISR aplicado al aumento salarial del 10 por ciento, a la totalidad del aguinaldo, prima vacacional, bono decembrino y a la constancia, pero también homologación al porcentaje descontado del Fondo de Ahorro de la misma forma que a los trabajadores del sector central estatal, “antes nos daban el retroactivo sin aplicación de ese impuesto”.
El 18 de Octubre del 2023 los sindicalizados del TSJ en Taxco pararon labores y cerraron los juzgados por más de una semana, para exigir al presidente del poder judicial, Raymundo Casarrubias Vázquez, cumpliera su palabra respecto al incremento salarial del 14 por ciento, sin embargo, el funcionario argumento que la Secretaría de Finanzas y Administración (Sefina) no le había liberado los recursos y por esa razón no se podía responder a la demanda.
Durante esa protesta por la cual se impidió el acceso a jueces, secretarios de acuerdos, personal administrativo y de intendencia, los suspegistas criticaron que el presidente del poder judicial incumplió el acuerdo de otorgar ese aumento negociado previamente, afectando con ello a unos 18 trabajadores basificados y a otros empleados no sindicalizados. En ese momento denunciaron que eran 19 las quincenas pendientes de pago con el aumento retroactivo para los basificados de Taxco, Tetipac y Pilcaya y que por ello cerraron los juzgados en el estado para exigir el incremento salarial negociado con Casarrubias Vázquez pero que no cumplió.