Por: Alejandro Gómez Sotelo.
En el marco del “Día de la Libertad de Expresión” agremiados a la delegación 82 del Sindicato Nacional de Redactores de la Prensa (SNRP) con sede en Taxco, se expresaron pacíficamente en el zócalo de la ciudad para solicitar a los diferentes órdenes de gobierno garantías y respeto a la labor informativa diaria, por tratarse de un derecho consagrado en la Constitución Política del país a través del cual la población tiene conocimiento de los aconteceres en su lugar de origen.
En la Plaza Borda, los informadores colocaron cartulinas para defender su trabajo realizado con absoluta responsabilidad y fuentes confiables en los diferentes medios de comunicación visibles, pero también evidenciaron la existencia de aficionados y fanáticos de redes sociales conocidos como “facebuqueros” o gente oculta en el anonimato, que en un afán protagónico, irresponsable y contrario a las reglas del periodismo se dedican a confundir a la población.
Dieron a conocer que la Libertad de Expresión es un derecho humano básico constitucional reconocido por la Organización de las Naciones Unidas (ONU), donde se expresa la necesidad de proteger a quienes ejercen el periodismo diariamente y garantizar su seguridad en el ejercicio de su labor, porque aún y cuando han existido un sinnúmero de discursos en la materia la realidad muestra que México encabeza la lista de más agresiones y homicidios de reporteros en todo el mundo.
“En México se han registrado más homicidios violentos de periodistas que en países en Guerra como Ucrania; las estadísticas no mienten y se muestra un incremento en cuanto a las agresiones hacia los comunicadores”, dijeron los agremiados a la delegación 82 del SNRP, quienes criticaron la actitud de las autoridades mexicanas cuando descartan inmediatamente y sin investigación previa, que la violencia y fallecimientos en el gremio sean por cuestiones de su trabajo.
Hicieron el llamado a evitar y prohibir los discursos de odio emanados desde las esferas de gobierno, que incitan a la violencia en contra de los medios de comunicación y de personas con pensamientos e ideologías diferentes, así como dejar de lado aquellas leyes “a modo” que pretenden criminalizar la libertad de expresión, porque si bien a través del autoritarismo se pudiera silenciar a un informador, pero la verdad no la podrán cambiar y mucho menos ocultar.
Aseguraron que las libertades y críticas fundamentadas no deben ser objeto de agresión, violencia o censura por parte de las autoridades y por el contrario, podrían asumirse como un apoyo para corregir deficiencias, “las instituciones tienen la responsabilidad de garantizar protección y erradicar toda conducta de acoso en contra de los informadores; la carta magna es muy clara y contempla esas medidas”, dijeron.
Hablaron de la existencia de cuando mucho “dos o tres” medios electrónicos que con profesionalismo y sustento desarrollan su trabajo diario en Taxco, sin embargo, la aparición repentina de más facebuqueros ha empañado la labor periodística, porque se dedican a efectuar un ejercicio sucio para confundir y mal informar a la comunidad e incluso inventar situaciones.